ARTÍCULO
Códigos éticos del ciberperiodismo
Por Amanda Escalona
Publicado: 07/09/2001
Todas las profesiones poseen un código deontológico, el cual es un conjunto sistematizado de normas, principios, creencias que fueron creadas y aceptadas por todo el colectivo de esa profesión.Esto es perfecto para su autorregulación, controlando así el comportamiento que hay que seguir si eres miembro de ella.
Por ello, un integrante de una profesión debe seguir este código sin duda alguna. Ejemplo: los médicos siguen un juramento, al igual que la policía, y los periodistas también deben seguir unas normas.
El periodismo tiene como objetivo informar los hechos tal cual ocurrieron. Y cuando todo se realiza de manera impresa, hay muchas maneras de asegurarse que lo que se publica sea legítimo y cumpla con las normas.
Pero cuando hablamos del ciberperiodismo las líneas pueden volverse un poco borrosas, debido a que todo ocurre de manera online y a que pueden surgir muchos inconvenientes como que las fuentes no sean confiables.
Es importante que estas normas sean renovadas cada cierto tiempo, ya que el mundo evoluciona, y las tecnologías y valores van creciendo y desarrollándose de manera diferente. Lo podemos ver en todos lados, hoy en día no nos manejamos con los mismos valores que lo hacían hace 50 años.
Entonces, cuando hablamos del periodismo tradicional, existen varias normas éticas que todos los periodistas deben seguir:
- El respeto a la verdad.
- Estar abierto a la investigación de los hechos.
- Perseguir la objetividad, aunque se sepa inaccesible.
- Contrastar los datos con cuantas fuentes periodísticas sean precisas.
- Diferenciar con claridad entre información y opinión.
- Enfrentar, cuando existan, las versiones sobre un hecho.
- Respeto a la presunción de inocencia.
- Rectificación de las informaciones erróneas.
La duda es si esos mismos códigos podemos aplicarlos al ciberperiodismo. Los periodistas que hacen su trabajo de manera virtual siguen siendo periodistas. Por ende, deberían seguir el mismo código ético y moral que sus colegas. Sin embargo, como mencionamos anteriormente, estas normas tienen que ir en constante evolución.
Con el ciberperiodismo nacen nuevos desafíos: los profesionales deben estar seguros de que la información que consiguen es veraz, de personas o páginas confiables; la manera en la que se jerarquiza, analiza e interpreta el contenido y la temática que se está trabajando. Esto nos hace entender que lo único que ha cambiado es el medio o la forma en la que se trabaja, pero no el sentido principal del mismo.
Características del ciberperiodismo
Es importante, para aprender cómo aplicar estas normas del periodismo tradicional al ciberperiodismo, que entendamos muy bien cómo funciona el ciberperiodista. Así que, a continuación, les explicaremos algunas características del mismo:
– Instantáneo y simultáneo: en el ciberperiodismo no se tiene que esperar por impresiones, aprobaciones, ediciones. Aquí los ciberperiodistas pueden publicar diferentes historias en cuestión de segundos, lo cual puede ser tan beneficioso como dañino.
– Continuidad: si tomamos de ejemplo un periódico podemos ver que su tiempo de vida es limitado. Pero cuando publicamos cosas en internet, su longevidad puede llegar a ser infinita. Asimismo, una noticia publicada online, puede ser actualizada constantemente. De esta manera el lector no debe esperar a una siguiente entrega del periódico, solo debe meterse en la página web y leer todas las noticias que desee sobre su tema de preferencia.
– Interactivo: a diferencia del periodismo tradicional, en el ciberespacio el espectador puede usar su voz para interactuar y dar su opinión, o incluso preguntar cualquier cosa.
– Versatilidad: a diferencia de los medios impresos, que solo sirven para ser leídos, en el medio digital la versatilidad está a la orden del día: chats interactivos, videos, incluso inteligencia artificial.
– Transnacional: como sabemos el periodismo tradicional tiene límites de fronteras. En cambio, el internet llega a todos lados. Por ende, es completamente internacional.
– Hipertextual: en los medios tradicionales o impresos, la hipertextualidad es básicamente nula. Sin embargo, en las redes sociales, o páginas webs, dentro de un mismo artículo hay un millón de posibilidades, puedes etiquetar a personas, colocar links a otras noticias, etc.
Como podemos ver, estos dos tipos de periodismo son muy diferentes. Por eso tenemos que ver cómo adaptar ese código deontológico del periodismo tradicional al del ciberespacio. Lo importante es que la persona que está detrás de la pantalla, escribiendo, investigando, editando es un periodista también, y por ello no debe romper ninguna de sus normas éticas.